Un poco de dulce en nuestras vidas y a petición de una seguidora!Sin ánimo de criticar a ninguna empresa industrial de galletas, como las caseras ninguna, además dan mucho juego: le podeis poner pepitas de chocolate, sin pepitas, con almendras, nueces, colorines…son rápidas y fáciles (en 15 minutos teneis una hornada) y son aptas para cocinarlas con los peques. Por cierto, yo siempre utilizo azúcar moreno, pero podeis utilizar la blanca de toda la vida.
Ingredientes:
- 1 bloque de mantequilla sin sal
- 3 tazas de harina (tamaño café con leche)
- 1/2 de azúcar moreno
- 2 cucharas de vainilla
- 1 huevo
Paso 1
En un cuenco grande cortamos la mantequilla en varios dados. Añadimos las 3 tazas de harina, la 1/2 taza de azúcar y la vainilla.
Paso2
Ahora empieza el trabajo manual: AMASAMOS sin parar con las manos (no desesperéis!) hasta conseguir una textura pastosa. Nos lavamos las manos y batimos un huevo que añadiremos a la masa pastosa.
Cuando lo tengáis todo mezclado lo dejais reposar 20 minutos en la nevera para que la mantequilla se recupere.
Paso 3
Sacamos el cuenco de la nevera y formamos pelotitas de masa (mas o menos una cucharada sopera de masa…el tamaño lo podéis elegir, si queréis galletas más grande ponéis más masa en la pelotita). Esto es como jugar con la plastilina: formamos las pelotas con las manos y aplastamos para conseguir la forma de la galleta.
Colocamos las galletas crudas en hileras en una base para el horno; se cuecen muy rápido, asi que ojo con dejarlas mucho en el horno: a 180º máximo durante 15-20 minutos.
Paso 4
Sacamos las galletas las ponemos a enfriar en una rejilla de metal (al principio estarán un poco blandas pero cuando se enfrían se van endureciendo).
Una vez frías están listas para ser devoradas!!!